Cuatro concesiones mineras explotan territorios muy biodiversos en el Ecuador. Desde 2008, la Constituci—n ecuatoriana plantea como objetivo nacional alcanzar el buen vivir a travŽs del respeto de los derechos humanos, colectivos y de la naturaleza: es el primer y œnico pa’s del mundo que reconoce derechos a la Tierra. Sin embargo, estos cuatro proyectos de miner’a a gran escala ponen en riesgo la alt’sima biodiversidad de la Cordillera del C—ndor, el p‡ramo de Quimsacocha, los bosques nublados de Pacto Ð Pichincha, y el valle de êntag. Las poblaciones de estas cuatro ‡reas se encuentran en resistencia: dicen que no han sido consultadas, que la miner’a atenta contra sus ecosistemas (fundamentalmente, amenaza las fuentes de agua), y que su buen vivir es sin miner’a. Este ensayo fotogr‡fico producido por los fot—grafos Felipe Jacome, Karla Gachet, Ivan Kashinsky, y Santiago Arcos revela los dos caminos contradictorios por los que podr’a optar el Ecuador: la dicotom’a entre las alternativas de desarrollo local productivo y el extractivismo en su mayor expresi—n.