Ciudadanos y colectivos de Tulcan denuncian que se han destruido cerca de 200 hectáreas de páramo pertenecientes a la Hacienda Chalpatán.
La Hacienda Chalpatán tiene una extensión de 1800 hectareas de las cuales 800 se mantienen como páramo y cerca de 1000 fueron intervenidas hace aproximadamente 40 años con siembra de pino y habilitadas para funcionat como potreros para ganado vacuno.
En su momento, el bosque fue explotado por la empresa Agropino. Cuando la empresa cerróse formó un bosque que formó un ecosistema de páramo y pino con flora y fauna nativa. Los potreros intervenidos de esa época sólo tenían un ligero pastoreo de ganado que no causaban mayor impacto y alrededor de 600 hectareas recuperaron la flora de paramo por la ausencia de ganado. En esta hacienda nace el río Bobo, es una gran planicie en donde existen decenas de quebradas, ojos de aguas, vertientes y humedales en general que forman en las partes mas bajas el río mencionado. Actualmente esta propiedad está ocupada por el Sr. Nilo Reascos y su familia, quienes compraron la hacienda a los señores Peña Durini en un valor de $450000 USD.
A partir de esa compra, comenzó una actividad de destrucción del páramo, los actuales dueños obtuvieron una supuesta licencia para explotación del bosque a través de Fernando Peña Durini quien aparentaba ser dueño de la hacienda, pero según los colectivos y ciudadanos que estan en contra de la destrucción del páramo, dicen que él no es dueño de la licencia de explotación, ya que pertenecia a la empresa Agropino que fue disuelta y no estaba adjudicada a la hacienda que fue adquirida por el Sr. Nilo Reascos.
Los ciudadanos denuncian tambien que el Ministerio de Agricultura y Ganadería otorgó la licencia de tala al Sr. Nilo Reascos, lo que ha provocado la destrucción de flora y fauna existente al interior del bosque sin que el Minsterio del Ambiente ejecute ningun mecanismo de protección y no existe un plan de manejo aprobado para la explotación del bosque de pino de la hacienda.
Se ha denunciado tambie que ya se ha metido maquinaria en alrededor de 200 hectareas de páramo virgen y páramo que se encuntraba en recuperación, causando la desaparición de decenas de quebradas y ojos de aguas, tambien se ha reportado que se han utilizado abonos y secantes de la tierra, lo cual ha cambiado la química del suelo y han comenzado a construir caminos sobre el páramo para la extracción de la madera.
El caos ambiental y destrucción de reserva hídrica así como la contaminación de humedales es alarmante en la zona.
Ya se han puesto las denuncias correspondientes ante el Ministerio del Agricultura y Ganadería y el Ministerio del Medio Ambiente.