“Tomaremos la batuta de defender nuestro territorio, para que sea libre de ésta minería contaminante”: Jorge Yunda

En una reunión de trabajo del gabinete del Distrito Metropolitano de Quito con los Gobiernos Parroquiales de la Mancomunidad del Chocó Andino, el Alcalde Jorge Yunda se pronunció en contra de la minería “El tema minero también me preocupa mucho, porque San Antonio de Pichincha, Quito, tiene ésta gran amenaza minera también”. El Alcalde se comprometió a defender el territorio. “Ahí vamos a tomar la batuta de defender a nuestro territorio, para que sea libre de esta minería contaminante”

La Mancomunidad del Chocó Andino se creo en el año 2014, esta conformada por las parroquias de Nono, Calacalí, Nanegal, Nanegalito, Gualea y Pacto. Esta zona esta entre los 500 y 4700 msnm, lo que la convierte en una zona con un altísimo nivel de biodiversidad y endemismo. Adem, regulando el clima,yolitanoiinues del efecto de gas invernadero. de Nono, Calacalio´aas de su biodiversidad, esta región cumple con la provisión de bienes y servicios ecosistémicos para la ciudad de Quito y  el Distrito Metropolitano, regulando el clima, el ciclo hidrológico y mitigando las emisiones del efecto de gas invernadero.

Desde hace años, organizaciones de la sociedad civil, activistas y pobladores de la mancomunidad han denunciado la entrada de minería ilegal y empresas mineras a esta zona.

«La minería esta relacionada al narcotráfico, a las armas. Los materiales que salen de aqui, pasan por la Simón Bolivar, por la Occidental, las volquetas con cuarzo, y se van a ser procesadas en el sur del país» son las palabras que el activista Inti Arcos pronunció al demandar que la alcaldia del distrito Metropolitano preste mas atención a este asunto dentro de las competencias que sí tiene el gobierno de Quito.

A pesar de estar reconocida como Reserva de la Biósfera por la UNESCO, el territorio esta casi completamente concesionado a alguna empresa minera, lo que pone en peligro a una las fuentes de agua y vida de la ciudad de Quito.

El manejo de esta zona, tanto por las amenazas mineras, como todas las demás problemáticas de las parroquias son una responsabilidad compartida de la población y los gobiernos en sus diferentes niveles.